El arrepentimiento como innovación

Me ha parecido muy interesante el artículo de Ana "La innovación en la empresa llevada a la práctica". Leyéndolo me han venido a la cabeza varias experiencias recientes, y no tan recientes, que creo son interesantes de contar y reflejan bien varios aspectos sobre la innovación en la empresa y, en particular, en ÁlamoConsulting. De estas reflexiones, nace este post.

Existe actualmente un debate muy extendido en nuestros clientes sobre el concepto "innovación", su definición y su alcance. En los últimos meses varios de ellos nos han propuesto colaborar en la creación de un Área de Innovación, en la configuración del departamento, en el diseño de su modelo organizativo (roles, perfiles, flujos conversacionales…), en la definición del ciclo de gestión de las ideas, en el lanzamiento de los procedimientos e incluso en la elaboración de un primer catálogo de iniciativas de valor...

Los clientes nos están planteando una amplia diversidad de inquietudes y objetivos de cara a crear, incubar y desarrollar eficientemente sus modelos de innovación que, en nuestra opinión, requerirán un enfoque personalizado para cada una de estas organizaciones atendiendo a múltiples factores: sector, situación de partida, madurez de su catálogo actual de servicios, morfología organizativa (flexibilidad de su estructura jerárquica, existencia de determinados roles y perfiles o posibilidad de adquirir nuevas competencias necesarias,... ), perfil e involucración de los profesionales, resistencia al cambio, peso de la tecnología en la configuración de sus productos o servicios, enfoque departamental o multiárea, perspectiva abierta o cerrada deseada para su modelo de innovación, nivel de riesgo a asumir, presupuesto asignado a la innovación (mucha veces no ya directamente sino en cuanto a costes de oportunidad por la dedicación de sus recursos), interés real en innovar o enfoque "escaparate" y, sobre todo, en función de la visión cortoplacista o largoplacista extendida en los responsables de las nuevas áreas de innovación.

Sin embargo, todos coinciden en contemplar una frontera muy difusa entre la creatividad y la innovación (conceptos distintos) e incluso nos plantean sus problemas para diferenciar sus “iniciativas innovadoras” de sus proyectos tradicionales.  Y no es un tema marginal: estas nuevas áreas de innovación tienen que justificar sus resultados frente al Comité de Dirección y contrastar su eficacia (respecto a la situación anterior) a partir de determinados indicadores-métricas de su gestión. Sus objetivos anuales dependen de ello.

Por tanto, se plantean dos retos previos: delimitar el concepto de innovación e identificar métricas de gestión para estas áreas de innovación.

  1. Respecto al segundo, en un próximo post profundizaremos en la concepción del cuadro de mando para la gestión de la innovación y en sus indicadores principales (número de ideas, prototipos, productos y servicios generados, etc). Os anticipo que es una línea de trabajo muy atractiva. 
  2. Respecto al primero, hay múltiples gurús de esta línea de conocimiento y únicamente me limitaré a apuntar algunas características (muy básicas) que utilizamos internamente en ÁlamoConsulting para catalogar nuestra actividad de innovación:
  • Generación de un nuevo producto o servicio mediante innovación tecnológica, de diseño, proceso... [tangibilidad de la idea]
  • Resolución de una necesidad o requerimiento de un cliente (u otra área de negocio) ya existente o de uno nuevo [aplicación de la idea]
  • Acceso a un nuevo cliente [demanda potencial real de la idea]
  • Obtención esperada de un retorno, bien por la posibilidad de incremento de ingresos (eficacia), bien por reducción de costes (eficiencia). [rentabilidad de la idea]

Quizá nosotros no seamos muy puristas con la innovación. Es posible. Pero somos realistas. Muchas veces innovar no es “crear” sino “adaptar” para dar valor y utilidad. Algunos ejemplos:

  • En su momento (finales de la década de los noventa) fuimos pioneros en el diseño e implantación de soluciones informacionales o DW para el sector financiero y seguros. Y sobre nuestro primer producto fuimos creando un amplio catálogo de nuevas soluciones (evolucionando el concepto data mart) con una misma línea argumental aunque diferenciadas por las áreas consumidoras de esa información (Marketing, Comercial, Riesgos, Comité de Dirección, Área Financiera, Actuarial, Planificación…). Podríamos habernos quedado allí: éramos el mejor equipo de profesionales en este ámbito dentro del mercado español. Pero le dimos una vueltecita…
  • A partir de ese conocimiento, enfoque y base metodológica nos planteamos una evolución disruptiva y, en colaboración con algunos de nuestros clientes-amigos (lo que ahora se denomina innovación abierta), trabajamos intensa e intensivamente hasta construir SIRBE, una solución de reporting normativo o regulatorio que es ahora líder en el mercado español. Y podríamos habernos quedado allí pero le dimos una vueltecita.
  • A partir de las soluciones informacionales para el sector financiero y de seguros, empezamos a plantearnos si podríamos utilizar la misma base de conocimiento de estas soluciones pero aplicándolas a otros sectores. Y pensamos que el sector sanidad sería una magnífica oportunidad para evolucionar… y adaptamos nuestros conceptos (del contrato al acto clínico, del gestor al médico, de la oficina al centro de salud, del cliente al paciente…)  hasta crear, con mucho esfuerzo y con un equipo multidisciplinar, ÁlamoHDe, solución informacional y de Cuadro de Mando verticalizada para Sanidad (quizá la de mayor perímetro funcional del mercado).

Por tanto, para innovar, según la experiencia de todos estos años, es necesario un equipo multidisciplinar, un entusiasmo por hacer cosas nuevas y, en nuestra opinión, es posible (y muy viable) basarse en productos y servicios actuales y “adaptarlos” (buscando tangibilidad, aplicabilidad y rentabilidad) como medio para avanzar hacia otras soluciones de valor. Para nosotros, quizá porque no tenemos más talento, representa un instrumento fundamental para nuestro crecimiento y para la diversificación de nuestro catálogo de servicios.

Pero también los grandes lo hacen así.  Si os fijáis en los links adjuntos, Goya aprovechaba sus trabajos antiguos o preliminares (prototipos o arrepentimientos) para construir grandes obras. La utilización de la reflectología ha permitido descubrir recientemente el retrato oculto de una mujer bajo la figura de Jovellanos en su lienzo “El Retrato de Jovellanos en el arenal de San Lorenzo (1780-1782)”: Goya reutilizó la figura del contorno de la mujer para retratar sobre ella a Jovellanos con la misma posición en sus brazos y pies.

http://www.elpais.com/articulo/cultura/imagen/tapada/elpepicul/20110205elpepicul_5/Tes

http://www.elpais.com/articulo/cultura/reflectologia/saca/luz/nuevo/arrepentimiento/Goya/elpepicul/20110205elpepicul_4/Tes

En resumen, y sin querer recordar aquí mi época en los Salesianos, arrepintámonos todos juntos.

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